martes, 27 de septiembre de 2011

Ruta de senderismo: El Pico Tesorero

Hoy os traigo una ruta recién salida del horno, pues la realicé el domingo y la redacté ayer. Probablemente la más dura de las que he realizado hasta ahora.

El pico Tesorero (2570 metros) no es ni el más famoso ni el más alto del nutrido grupo de cumbres de los Picos de Europa que superan los 2500 metros, pero tiene la particularidad de ubicarse en el punto donde confluyen las provincias de León, Asturias y Cantabria, y en constituirse probablemente en el mejor mirador sobre los macizos Central y Occidental; pues no tiene cumbres cercanas. Ello, unido a su relativamente baja dificultad técnica, lo convierte en una buena opción como primera aproximación a la zona. Para añadir un poco de salsa al recorrido, cambiaremos el ascenso estándar mediante el teleférico por la espectacular alternativa que supone la canal de la Jenduda, lo que nos lleva a un desnivel total de casi 1500 metros.

Dificultad: Muy alta
Orientación (sin GPS con track o cartografía): Normal (con día claro)
Belleza: Muy Alta
Tiempo: 8 horas (14 kilómetros)

Situación

Desde Santander deberemos seguir la A8 en dirección a Oviedo hasta la salida de Unquera. Desde aquí seguiremos la N-621 en dirección a Potes. Al cabo de unos kilómetros entramos en territorio de Asturias y cruzamos Panes. Más adelante nos internamos en el Desfiladero de La Hermida. Terminado este largo paso de más de 20 kilómetros llegamos a Potes. De las carreteras que salen de este pueblo tenemos que seguir la que se dirige a Fuente Dé, lugar la que llegamos al cabo de 23 kilómetros adicionales. Dejaremos en el coche en el amplio aparcamiento del Teleférico, nada más pasar el Parador Nacional.
 

Puntos de interés


Canal de la Jenduda. Vistas sobre el circo de Fuente Dé y zona sur de Liébana. Recorrido por el Macizo Central. Cabaña Verónica. Vistas desde el Pico Tesorero. Vistas desde el Mirador del Cable. Descenso en el Teleférico.

Descripción de la ruta.

Aparcaremos el coche preferentemente al final del aparcamiento. Mientras nos solazamos con el paisaje podremos observar la estrecha canal por la que hemos de ascender, que se encuentra un tanto a la izquierda de la estación superior del teleférico. Superamos el vallado y empezamos a andar por el sendero que nace en el límite entre la amplia pradera y el bosque que crece a su izquierda. Una serie de curvas nos lleva hasta el final del bosque y enfrente de la gran pared rocosa. Al poco llegamos al ramal que hacia la izquierda lleva hacia la canal de ascenso a Liordes.
 
Aunque la señalización vertical sugiere este camino nosotros seguimos de frente, con una pendiente en principio llevadera. Pasados unos 700 metros desde el anterior cruce, y ya inmersos en la empinada ladera, tomamos una revuelta que nos deja enfrente de una amplia canal que nos permite evitar la pared rocosa.


Ignoramos otro sendero que va hacia la derecha y seguimos por la canal. El sendero se va difuminando de modo que nos tendremos que guiar cada vez más por los hitos montañeros mientras que la pendiente se va haciendo cada vez más dura. Estos hitos nos irán acercando poco a poco hacia la pared hasta llegar a una estrecha y empinada canal de unos 20 metros de ancho, la Canal de la Jenduda, que se abre entre la mole pétrea hacia la derecha.



Zigzagueamos ascendiendo por la misma con cierta precaución ante peligrosos resbalones. Aproximadamente hacia la mitad encontramos una cuerda con nudos, que necesitaremos para salvar un paso de cierta complicación.
Pasado este punto continuamos hasta el final de la canal. Los últimos metros son los que implican mayor riesgo por piedra suelta. En este sentido deberemos vigilar ante posibles piedras caídas desde arriba o que nosotros podamos arrojar sobre los montañeros que vengan tras nosotros. De todas formas con un poco de concentración no debe haber mayor problema.



Llegamos al final del duro ascenso por la canal en la cota 1800, lo que nos habrá llevado algo menos de dos horas. Hemos llegado a una pequeña braña tras la cual hemos de ascender un poco más desembocando en el mar de roca que ocupa la zona alta de picos de Europa.

Entre los distintos senderos, deberemos seleccionar el que va en dirección casi frontal, un poco hacia la derecha. Como referencias tendremos en la distancia el marcado camino que discurre por el canchal bajo el macizo de Peña Vieja y Peña Olvidada y una gran hoya ocupada por una pequeña laguna (seca en verano) que iremos dejando  a nuestra izquierda.


Sin mucha dificultad (si el día es despejado) encontraremos el sendero correcto que nos lleva paulatinamente hacia el camino indicado, que tomaremos hacia la izquierda. Estamos en el recorrido que desde el teleférico lleva hacia La Vueltona, muy recorrido no sólo por montañeros, sino también por personas que quieren dar un paseo menos ambicioso.

700 metros después llegaremos a esta gran curva conocida como la Vueltona. Desde aquí salimos del camino para seguir por el marcado sendero (conocido como Sendero Bustamente) que continúa de frente y que vuelve a ascender.


Desde este punto observamos por primera vez nuestro objetivo, un pico de forma piramidal que localizamos un poco a la izquierda del pico de los Horcados Rojos, de tonalidad característica. De hecho el sendero se va aproximando a la pared de este último pico, primero mediante un tramo recto y luego tras sucesivas revueltas.


Recorrido kilómetro y medio desde La Vueltona, y ya cerca de la cota 2200, llegamos a una clara bifurcación. Hacia la derecha se encuentra el sendero que conduce a Peña Vieja (2613 m, la segunda de Cantabria), pero nosotros iremos hacia la izquierda. Tras un breve tramo de descenso alcanzamos la base de los Horcados Rojos y al terminar la misma una nueva bifurcación.

El sendero de la derecha conduce al collado de Horcados Rojos y el de la izquierda al peculiar refugio de Cabaña Verónica, que habremos estado observando desde La Vueltona. En unos minutos desde el cruce llegamos al refugio, ya a más de 2300 metros, donde podemos tomarnos un descanso antes de afrontar la última parte del ascenso.





En unos minutos desde el cruce llegamos al refugio, ya a más de 2300 metros, donde podemos tomarnos un descanso antes de afrontar la última parte del ascenso. Desde Cabaña Verónica tenemos grandes vistas de toda la ascensión y observamos ya la cercanía de la bella pirámide de Pico Tesorero, precedida por una mole rocosa amorfa previa. Hemos de prestar atención al collado que se encuentra un poco a la derecha de la cumbre ya que ésta nos indicará la dirección a seguir entre los variados y poco marcados senderos, señalados sólo por hitos montañeros (llamados “jitos” por aquí).


Dejaremos a nuestra izquierda la torre meteorológica que se encuentra un poco por encima del refugio y avanzaremos en la dirección indicada con cuidado de evitar las peligrosas grietas, prácticamente sin ganar altura. Con esto llegaremos al pequeño circo que se encuentra bajo la cumbre y afrontaremos el empinado ascenso hasta el collado indicado.
 
Desde aquí ya tenemos unas maravillosas vistas hacia la parte norteña de Picos de Europa, con el Naranjo y Torrecerredo (la cota más alta de Picos, con sus 2648 metros) en primer término y el mar a poco que esté el día despejado. Ya nos quedan unos 100 metros de desnivel hasta la cumbre. Como siempre seguiremos los hitos montañeros y en unos 15 minutos adicionales y con mucha atención (la pendiente es considerable y los puntos de apoyo reducidos) llegamos a la cumbre.
 
Desde aquí las vistas son inmejorables, de hecho desde este punto se pueden contemplar todas las cimas de “picos” que superan los 2600 metros.  Torrecerredo; a la derecha Asturias y a la izquierda León. Por detrás y mar y al fondo a la izquierda la Sierra del Sueve.
 

El Naranjo de Bulnes o Pico Urriellu. Por detrás el mar.


El mirador del Cable y los bosques de Liébana.


Peña Vieja (2617 m) y Torre de los Horcados Rojos.
 

Macizo donde se ubican Torre Blanca (2617 m), Pico Tirso (2639 m) y el Llambrión (2642 m). A la izquierda de la foto está Cantabria. En la parte derecha, al fondo, se intuye Peña Santa, que con sus 2596 metros es la cúspide del macizo oriental de Picos.


Tras el merecido descanso descendemos los últimos metros hasta el collado pero en lugar de volver hacia el circo seguimos en dirección este por un sendero alternativo (de hecho es la opción más habitual de acceso al Tesorero) en busca del collado de Horcados Rojos.

Tras algunos pasos de cierta complejidad llegamos a las proximidades de este collado; punto de destino habitual para los que quieren contemplar el Naranjo de Bulnes viniendo desde el Teleférico. Aún podemos ver la vista atrás (a la derecha unos picos conocidos como los Urrieles, al otro lado queda Asturias).


Una vez llegados al sendero que da acceso al collado lo tomamos en sentido descendente hacia la derecha. En unos minutos llegamos al cruce de acceso a Cabaña Verónica, en la base de Horcados Rojos.  Desde aquí retomaremos todo el trazado que ya recorrimos en el ascenso, pero llegados a La Vueltona y al camino principal no lo abandonaremos sino que continuaremos por el mismo.

Recorridos 1,5 kilómetros desde La Vueltona llegamos a un cruce de caminos. Por la izquierda llegaríamos a los Puertos deÁliva pero nosotros volvemos hacia la derecha y en unos minutos llegamos a la estación superior del Teleférico de Fuente Dé. Antes de tomar el mismo es obligatorio disfrutar de las inigualables vistas de que se disfrutan desde el mismo.


Y volviendo la vista atrás, contemplar la cumbre conquistada.


 
Comentarios.
 
Estamos ante una auténtica ruta de montaña ante la cual se ha de estar seguro de las propias fuerzas y se ha de tener un mínimo de preparación previa. Son abundantes los puntos de cierta complicación, que no implican mayor dificultad para la persona acostumbrada a la montaña pero que pueden crear cierta ansiedad en otra. En todo caso no se necesita preparación técnica.

No aconsejo en absoluto la realización de la ruta en caso de niebla y si el día no es muy claro será más difícil la orientación. Cabaña Verónica, Horcados Rojos y el propio pico Tesorero son las mejores referencias. En el tramo final, y ante la duda, podemos ascender también por Horcados Rojos, aunque con ello no pasaremos junto a Cabaña Verónica.

No hay fuentes en el recorrido y si el día es caluroso hemos de tener en cuenta que el sol nos castigará durante todo el recorrido. En Cabaña Verónica venden refrescos fríos con cierto sobreprecio.

Como alternativa o complemento a la presenta citaremos que desde el collado de Horcados Rojos se asciende con relativa facilidad al pico que le da nombre (2508 metros). El ascenso a Peña Vieja (2614 m) coincide en buena parte con esta ruta.

El recorrido de hoy se simplifica sensiblemente si realizamos el ascenso también por el Teleférico; en todo caso merece la pena subir al menos una vez por La Jenduda. Los precios en 2011 son de 15,50 euros ida y vuelta y 9,20 sólo vuelta. El primer teleférico asciende a las 10:00 y el último desciende a las 18:00 (ojo a este último dato), salvo en Julio y Agosto, cuando que se alarga.

Track de la ruta.


miércoles, 21 de septiembre de 2011

Ruta de senderismo: La Vega de Liordes

El circo de Fuente-dé, en el corazón de los Picos de Europa, es muy conocido no sólo montañistas y excursionistas, sino también por el turismo en general, merced a la atracción que supone el Teleférico desde el que se pueden vislumbrar amplios paisajes y se puede tener la sensación de ser montañero sin quitarse las sandalias.
 
Alternativamente existen una serie de rutas que parten desde este punto sin tomar el Teleférico, la mayoría implicando grandes esfuerzos de aproximación y complicadas canales. Una de las menos complejas, y aún así interesante, es la ruta circular en torno a Peña Remoña (2227 m) que permite acceder al interesante paisaje de la Vega de Liordes.

Dificultad: Alta
Orientación (sin GPS con track o cartografía): fácil
Belleza: Alta
Tiempo: 5 horas (14 kilómetros)

Situación

Desde Santander deberemos seguir la A8 en dirección a Oviedo hasta la salida de Unquera. Desde aquí seguiremos la N-621 en dirección a Potes. Al cabo de unos kilómetros entramos en territorio de Asturias y cruzamos Panes. Más adelante nos internamos en el Desfiladero de la Hermida. Terminado este largo paso de más de 20 kilómetros llegamos a Potes. De las carreteras que salen de este pueblo tenemos que seguir la que se dirige a Fuente Dé, lugar al que llegamos al cabo de 23 kilómetros adicionales. Dejaremos en el coche en el amplio aparcamiento del Teleférico, nada más pasar el Parador Nacional.

Puntos de interés

Hayedos de Fuenfría. Valle del Río Cantiján. Subida por la canal de Pedabejo. Vistas de los picos de Liordes. Vega de Liordes. Vistas y bajadas por los Tornos de Liordes.

Descripción de la ruta

Seguimos la carretera unos metros hasta que termina en una especie de rotonda. Continuamos por el camino que se abre a continuación y que se introduce en la espesura. Muy pronto llegamos a una bifurcación en la que tomamos el camino de la derecha (a la izquierda está el camping).



Avanzamos entre hayas y avellanos en dirección sur y por un camino empinado pero llevadero. A nuestra izquierda vemos el incipiente valle del río Deva, con los pueblos de Pido y Espinama en primer término.


Llegamos al cabo de kilómetro y medio a los invernales de Berrugas. Desde aquí cambiamos de dirección para avanzar hacia el oeste. Por ello la ladera es más soleada y durante un tramo los robles se adueñan del paisaje. Observamos unas grandes peñas a mano izquierda mientras empezamos a embocar el valle del río Cantiján, entre ellas cae la cascada del Somo. En el kilómetro 2,2 llegamos a un importante cruce, el que hemos de tomar el camino, algo menos marcado, que gira hacia la derecha.



En los siguientes metros trazaremos varias curvas hasta que nos situaremos de nuevo en dirección este, cada vez a mayor altura. Mientras que la ladera de enfrente aparece boscosa, nuestro camino está ahora despejado. De esta manera, con algunos tramos más dificultosos pero en general de forma llevadera, llegamos en el kilómetro 4 (cota 1550 metros), tras un giro a la vista del macizo de Peña Remoña. Una canal, canal de Pedabejo, conduce al encuentro de la peña más a la izquierda y más humilde con la siguiente y más imponente de la derecha (Torre Pedabejo).




Es en este punto cuando el recorrido abandona el camino principal y se convierte en un sendero que avanza en la dirección indicada. Nos orientaremos con cierta dificultad ya que por momentos el sendero se difumina y las señales de color amarillo y blanco no son muy frecuentes, pero el destino es claramente la canal indicada y como referencia indicaré que el sendero comienza un poco por el lado derecho para ir yendo paulatinamente hacia la izquierda.

Con un poco de esfuerzo alcanzaremos la base de la canal propiamente dicha, junto a un lavadero. Aquí encontramos una señal que nos señala el camino directo al valle de Valdeón y el que nosotros hemos de seguir, por la propia canal.


Siguiendo tanto las señales de pintura como los montoncitos de piedras llegamos a la zona rocosa, hasta situarnos directamente bajo la gran peña caliza. Empezamos a remontar la ladera con bastante dificultad, pues los corrimientos de piedras hacen poco transitable y un tanto resbaladizo el sendero. A medida que vamos ganando altura van mejorando las vistas sobre los montes de cierre sur de Liébana.



 Finalmente en el kilómetro 6 finaliza la ascensión por la canal de Pedabejo. Hemos llegado al collado de Remoña o alto de la Canal (2030 m). De frente nos encontramos con una nueva peña de roca pura pero nosotros giraremos un poco hacia la derecha, ascenderemos un poco más, y llegaremos a la vista del macizo compuesto por Los picos de Torres Salinas y Torres del Hoyo de Liordes (ambas por encima de los 2400 metros). Todo es roca pura en este entorno.

Empezamos a descender siguiendo en todo momento el sendero y al cabo de unos centenares de metros empezamos a ver bajo nosotros, un poco hacia la derecha, una gran hondonada herbosa conocida como Vega de Liordes.


Llegamos a dicha vega, situada a unos 1950 metros de altitud, junto a una pequeña edificación conocida como casetón de Liordes. La pradera es ocupada en verano por ganado variado y es recorrida por un arroyo sin salida que se introduce en las profundidades para salir de nuevo a la superficie en los valles de León.

Para continuar nos seguimos fiando de las señales del sendero, de modo que en lugar de atravesar la pradera de forma transversal más bien la vamos bordeando por el lado derecho. Como avanzamos con facilidad podemos disfrutar del gran anfiteatro rocoso que nos circunda.

El sendero llega al final de la vega de Liordes y busca el paso que permite abandonarlo por su parte este (el collado de Liordes). Ascendemos un poco mientras observamos los restos de algunas construcciones que son los ecos de pequeñas explotaciones mineras de principios del siglo XX.

Las indicaciones nos llevan hacia la parte izquierda de este paso, hasta que alcanzamos el punto en el que se deja de ascender. Al poco aparece ante nosotros la sobrecogedora visión del circo de Fuente Dé, cuyo fondo se encuentra 900 metros por debajo de nosotros.
 

Encontramos un inverosímil sendero que empieza a bajar por esta empinada y larguísima canal. Nos encontramos sobre los restos del antiguo camino que servía de servicio a las minas. El sendero es conocido con el nombre de los Tornos de Liordes, por el gran número de revueltas (dicen que 40) que hay que afrontar hasta llegar al fondo del valle.

El descenso no es especialmente fácil. Los desplazamientos de piedras hacen que la vereda esté especialmente maltratada y hay que estar atento para poner el pié de forma adecuada para no tener una desagradable sorpresa.

Ello nos obliga a no apartar la vista del suelo con lo que habrá que parar para poder disfrutar de la privilegiada vista que aparece ante nosotros. Podemos observar con un poco de atención incluso el teleférico que al principio transitará casi siempre por debajo de nosotros.
 


Tras un descenso que se hace interminable llegamos por fin al circo de Fuente Dé. Descendemos un poco más, atravesamos una pequeña zona boscosa y salimos a la pradera que se encuentra junto al aparcamiento donde dejamos el coche.


Comentarios.

La ruta descrita se corresponde con el sendero PR-PN-25 de la red de senderos del Parque Nacional Picos de Europa. (mas información); en realidad una parte del recorrido discurre ya por tierras Leonesas. Se puede considerar una ruta intermedia entre el montañismo y el senderismo. No en vano son unos 900 metros de desnivel aunque se ven en cierta medida compensados al ser una ruta relativamente corta y tener largos tramos donde el avance es relativamente sencillo.
La ruta se puede desarrollar también en sentido contrario aunque el propuesto parece el más aconsejable. Deberemos en todo caso extremar la atención tanto en la canal de Pedabejo como en el descenso por los Tornos de Liordes. Para los que se queden con ganas de más, existe la posibilidad de ascender a Peña Remoña, siendo el acceso más factible el punto más alto del collado de Liordes. Deberemos de calcular dos horas adicionales entre la ida y la vuelta.

En nuestro recorrido encontraremos una fuente de agua potable al poco de empezar (Fonfría) y luego en los metros siguientes alguna más en las que se señala que no han recibido tratamiento sanitario.

Por la zona disponemos de muchas opciones alternativas. El teleférico de Fuente Dé (no precisamente barato, 15 euros y medio) nos permite desde limitarnos a un simple ascenso-vista-descenso hasta como campo base para excursiones y montañismo. Más en http://reddeparquesnacionales.mma.es/parques/picos/guia_home.htm.


Vídeo con más fotos


miércoles, 14 de septiembre de 2011

Ruta de senderismo: Los Puertos de Áliva

Los puertos de Áliva son unas amplias praderas de montaña que se sitúan entre los macizos central y oriental de Picos de Europa. El acceso más estándar es desde la cota superior del Teleférico de Fuente Dé, pero para el que quiera evitarlo se puede partir desde el pueblo de Espinama y llegar mediante un relativamente largo y empinado ascenso, aunque sin complicaciones especiales.
 
Dificultad: Media
Orientación (sin GPS con track o cartografía): Fácil (sin niebla)
Belleza: Alta
Tiempo: 4 horas y media (16 kilómetros) (ver comentarios)

Situación
 
Desde Santander deberemos seguir la A8 en dirección a Oviedo hasta la salida de Unquera. Desde aquí seguiremos la N-621 en dirección a Potes. Al cabo de unos kilómetros entramos en territorio de Asturias y cruzamos Panes. Más adelante nos internamos en el Desfiladero de la Hermida. Terminado este largo paso de más de 20 kilómetros llegamos a Potes. De las carreteras que salen de este pueblo tenemos que seguir la que se dirige a Fuente Dé. Llegamos a Espinama en el kilómetro 18.

Puntos de interés:

Valle del río Nevandi. Invernales de Iguedri. Puertos de Áliva. Vistas sobre Peña Vieja.


Descripción de la ruta:


En el pequeño pueblo de Espinama (880 mts) aún quedan interesantes ejemplos de casa popular. Tomamos cualquiera de las dos calles que remonta el río Nevandi y que confluyen al final del pueblo en un amplio camino que deja el cauce a la izquierda. A partir de aquí nos toca remontar esta ancha pista salvando un fuerte desnivel sólo compensado por el buen firme y el estar relativamente sombreado.




Al poco de empezar a ascender ya veremos sobre nosotros el Pico de Valdecoro, a más de 1800 metros. A nuestras espaldas el cerrado hayedo de las Ilces. La vegetación se compone esencialmente de robles.

Al cabo de 3 kilómetros (cota 1300 mts) la arboleda se difumina y llegamos a los invernales de Iguedri, un conjunto de cabañas que destaca por su gran número y su buen estado. Casi inmediatamente llegamos a las portillas del Boquerón, que dan paso a los puertos de Áliva.




Los siguientes metros discurren por un pequeño valle mientras observamos de frente la mole caliza del Pico Cortés. Se nos incorpora un camino desde nuestra derecha y tras unas fuertes pendiente y revueltas vamos entrando en la parte principal de los Puertos de Áliva. A la izquierda aparecen las casi fantasmales montañas de Peña Vieja y Peña Olvidada mientras se extiende junto a nosotros una gran pradera ocupada por vacas, caballos y ovejas.

En la cota 1470 (5 kilómetros) ignoramos un camino que sale a la derecha en dirección a Sotres (será por el que volvamos) haciendo lo mismo con un segundo camino que surge poco después. Entre ambos observaremos ya por debajo de nosotros un pequeño edificio religioso que corresponde a la ermita de la virgen de Áliva o de La Santuca, festejada el 2 de Julio con romería.



Seguimos ascendiendo por el camino principal entre la gran pradera, siendo cada vez más presente la presencia de Peña Vieja frente a nosotros. En este tramo empezamos a vislumbrar el edificio del Hotel Refugio de Áliva bajo este macizo rocoso. Alcanzaremos dicho lugar en el kilómetro 7 (cota 1670 m).
Nuestras excursión de hoy acaba en este punto, pero nos asomaremos al otro lado para observar el edificio blanco con tejado rojo del chalet Real, que se encuentra directamente bajo la peña. Fue construido para el rey Alfonso XIII cuando venía a cazar invitado por la real compañía Asturiana dedicada a la extracción de Zinc.





Podemos volver sobre nuestros pasos pero en lugar de ello proponemos un breve recorrido circular. Para ello tomaremos el sendero que recorre en sentido descendente el cordal en el que se encuentra el refugio de Áliva, la Llomba del Toro, y que en realidad es la antigua morrena del glaciar que en cuaternario ocupó esta área.

Al poco nos encontramos con un camino más marcado que podemos tomar a la derecha para enlazar con el camino de ida, pero podemos continuar unos centenares de metros más de frente.


Desde aquí podemos ver bajo nosotros la ermita de la Santuca y un camino que pasa junto a la misma y que va paulatinamente al encuentro del que nosotros llevamos. Si seguimos el camino acabaremos encontrado dicha unión, pero por no alargar en exceso el recorrido podemos abandonar la loma por su lado derecho, atravesar un tramo de praderías e incorporarnos al camino indicado en busca del encuentro de la ermita.

Desde la misma seguiremos disfrutando de estos preciosos prados de montaña hasta que en unos 800 metros adicionales nos acabamos incorporando al camino por el que ascendimos. Desde aquí no queda sino desandar lo andado hasta Espinama.






Comentarios.


En verano puede llegar a ser difícil aparcar en el pueblo de Espinama y puede llegar a ser frecuente el tránsito de vehículos en todo-terreno hacia el refugio de Áliva.. El recorrido se puede alargar o recortar en función del momento en que iniciemos el regreso. Tenemos fuentes en los invernales de Igüedri y pasado el portillo del Boquerón.

La forma de acceso más habitual a los puertos de Aliva es desde el Teleférico de Fuente Dé, mediante un cómodo recorrido en descenso. Recientemente se ha habilitado un sendero entre la portilla del Boquerón y Fuente Dé para evitar el recorrido final por carretera entre Espinama y Fuente Dé. Por la zona existen varias excursiones alternativas: Camino a Sotres, Subida a Pico Cortés, ruta a Mogrovejo por la Peña Oviedo…

Track de la ruta: