martes, 28 de agosto de 2012

Senda Fluvial del Nansa

Retomamos las entradas tras las vacaciones con este sencillo recorrido por el curso bajo del río Nansa, muy cerca de su ría, acondicionado por el Ministerio de Medio Ambiente.
 
Dificultad: Baja
Orientación (sin GPS con track o cartografía): Muy fácil
Belleza: Normal
Tiempo: 3 horas y 40 minutos (14 kilómetros)

 
Situación.

Para acceder al punto de partida de la ruta debemos seguir la A-8 en dirección a Oviedo hasta que, pasado San Vicente de la Barquera, nos encontremos con el cruce indicativo de las cuevas del Soplao y Valle del Nansa. Tomaremos un par de kilómetros la antigua nacional y luego nos desviaremos por la Comarcal S-223, que remonta el río.
 
Tras apenas un par de kilómetros llegamos al pueblo de Muñorrodero. Atravesado su núcleo urbano, y justo a la altura del cartel indicador del fin de pueblo encontramos un cruce a la derecha (muy cercano a un vivero de plantas) y enseguida los carteles indicadores de inicio de la ruta.
 
Podemos dejar el coche en el entorno de la entrada del vivero o seguir las indicaciones hacia el aparcamiento, que se encuentra unos doscientos metros más adelante, junto a un parque y un campo de fútbol, en cuyo caso deberemos iniciar la ruta remontando este último tramo.

Puntos de Interés

Entorno fluvial del Nansa. Pequeños desfiladeros rocosos. Cascada de la parte final. Tramos en los que se discurre por puentes, plataformas y escaleras de madera.

Descripción de la Ruta
 
La señalización nos lleva a tomar la orilla izquierda del río, empezando por unas escaleras que nos permiten salvar un vallado ganadero. Tras unos 500 metros y en las cercanías de un meandro unas escaleras muy bien acondicionadas nos permiten tomar altura para solventar un tramo rocoso. Poco después entramos en un bosque de ribera dominado por grandes alisos y robles.
 
Antes de los dos kilómetros el paisaje se abre un poco y llegamos al primer punto en el que se nos ofrece un trazado para el caso de aguas bajas y otro para periodos en los que las márgenes del río pueden estar inundadas. En todo caso ambos senderos transcurre muy cerca uno del otro.
 
Durante el siguiente kilómetro seguiremos con el río a nuestra derecha mientras que a izquierda se suceden diversas plantaciones. Hacia el kilómetro 3 el sendero vuelve a verse dominado por el bosque de ribera, en donde además de los omnipresentes avellanos silvestre se observan alisos, robles, álamos, castaños… También observamos diverso equipamiento preparado para los pescadores: refugios, plataformas, cables…
 
Hacia el kilómetro 4 llegamos a una zona estrecha y rocosa que superamos gracias a unos estratégicos peldaños y escaleras de madera. En esta zona encontramos la entrada a la cueva del Rejo.
 
Tras un tramo algo más monótono volvemos a encontrarnos con la bifurcación entre el sendero para aguas bajas y el de aguas altas, siendo más recomendable el primero si es practicable. Unidos de nuevo las dos veredas nos queda ya poco para el final del recorrido.
 
Tomamos unos metros por un camino más ancho pero enseguida lo dejamos buscando la senda que sigue más cercana al río. Pasamos junto a un último refugio en una zona más despejada, descendemos por una zona rocosa ayudados por unos escalones de piedra y acabamos llegando al punto en el que el río de Suspino desemboca en el Nansa por medio de una bonita cascada.
 
Justo al lado encontramos la central hidroeléctrica de Trascudia. El sendero todavía remonta unos metros más hasta acabar junto al panel indicador y una pista asfaltada que conduce a Trascudia y Camijanes. El regreso lo hacemos por el mismo camino.
 
Comentarios
 
Ruta muy sencilla, ideal para toda la familia, salvo si acaso por algunos tramos que hemos de remontar por muy bien preparadas escaleras de piedra o madera y por una distancia relativamente larga.

Si deseamos hacerla en un único sentido indicar que la pista de servicio a la Central sale de la S-223 aproximadamente un kilómetro antes de llegar a Camijanes, atravesando el núcleo de Trascudia.
 
La señalización es también excelente (en el momento que yo realicé la ruta). En todo caso el río a nuestra derecha es la mejor referencia. Sólo deberemos prestar un mínimo de atención para no tomar caminos más anchos que se alejan del río.
 
Tenemos la posibilidad de empezar desde el mismo núcleo de Muñorrodero, por la calle que nace a la derecha, junto a la iglesia. Llegaremos junto a unos altos setos. Desde aquí podemos ir por una de los dos caminos peatonales que transitan a ambos lados del río y que confluyen junto a la zona deportiva que antes citamos. En este caso el recorrido se alargará aproximadamente un kilómetro más a la ida y otro a la vuelta.

Track de la ruta (pulsa en el círculo verde para más información)


Presentación con fotos de la Ruta