miércoles, 14 de diciembre de 2011

Ruta de senderismo: La braña de los Tejos

Antes de dar por concluída la serie de entradas dedicadas a Liébana, y con ello tomarme el descanso invernal, vamos a ver dos lugares de gran interés. El primero es La Braña de los Tejos, un pequeño rodal de centenarios Tejos situado a 1400 msnm, en la sierra de las Cuerres. El acceso más tradicional es el que parte del pueblo de San Pedro de Bedoya, ya en Liébana, por un camino hereda el paso tradicional entre Liébana y Lamasón, antes de la construcción de la carretera por el desfiladero de La Hermida.

Dificultad: Alta
Orientación (sin GPS con track o cartografía): Fácil
Belleza: Alta
Tiempo: 4 horas (15 kilómetros)



 Situación

Desde Santander deberemos seguir la A8 en dirección a Oviedo hasta la salida de Unquera. Desde aquí seguiremos la N-621 en dirección a Potes. Al cabo de unos kilómetros entramos en territorio de Asturias y cruzamos Panes. Más adelante nos internamos en el Desfiladero de La Hermida. Terminado este largo paso de más de 20 kilómetros llegamos al municipio de Cillorigo de Liébana. Transcurridos unos kilómetros llegamos a la carretera que, hacia la izquierda conduce, entre otros pueblos, a San Pedro de Bedoya. Durante los cuatro kilómetros que nos separan de este pueblo amos ganando altura, hasta llegar a los 500 msnm. Dejaremos el coche junto a las primeras casas.

Puntos de interés.

Valle del río Santo. Panorámicas. Braña de los Tejos.

Descripción de la ruta.

Empezamos a andar por la calle principal del pueblo, que sigue hacia el este. En unos instantes llegamos al final del caserío y la calle se convierte en un marcado camino. Poco a poco nos vemos acompañados de vegetación, en la que se combinan especialmente avellanos silvestre y hayas.





De esta manera vamos ganando altura poco a poco por la parte sombreada del valle del río Santo. Sin mayor novedad llegamos al cabo de unos dos kilómetros a una pequeña fuente. Inmediatamente después encontramos un camino hacia la derecha que ignoramos y un giro nos lleva a la otra vertiente del valle.

A partir de aquí empieza un largo y duro ascenso en el que el camino traza varios zigzags, con tramos rectos de longitud variable. En los primeros momentos encontramos varias cabañas acondicionadas como viviendas, pero poco a poco el robledal se va haciendo único protagonista.

 

Tras casi dos kilómetros de avance llegamos a la cota 960. En este punto, junto a un prado de superficie relativamente considerable, llegamos a un cruce en el que hemos de tomar el camino de la derecha, que sigue ascendiendo.

Desde este punto podemos parar a contemplar el valle. Mientras que la ladera sur aparece cubierta de un espeso hayedo, la norte se ve ocupada por un tupido robledal. El valle se cierra al este por el pico Paraes, mientras que al oeste vemos parte del macizo oriental de Picos de Europa.
 

Tomando los descansos que consideremos necesarios, continuamos con el ascenso. Superada la cota 1100 llegamos a una portilla canadiense, tras la cual el bosque se va haciendo más abierto y acaba convirtiéndose en una pradería. Un último esfuerzo nos permite llegar a un collado, a 1273 metros. Llevaremos algo más de cinco kilómetros de avance.



Los prados aparecen ocupados por ganado y un par de establos. En la otra vertiente observamos un pequeño hayedo y de frente un pequeño macizo rocoso donde ya se encuentra la Braña de Los Tejos. Bajamos unos metros hasta el bellos rodal de hayas. Rechazamos el camino que hacia la izquierda conduce al valle de Lebeña y continuamos por el bosque mientras volvemos a ascender.




Salimos muy pronto del hayedo y afrontamos un nuevo tramo de ascenso pronunciado. En unos minutos llegamos al collado Pasaneo, a 1350 metros. A otro lado tenemos una amplia panorámica del valle de Lamasón en primer término y la zona costera al fondo.




En este punto termina el camino como tal. Siguiendo las indicaciones cruzamos el vallado y al otro lado, hacia la izquierda, buscamos el sendero que asciende a lo alto de este pequeño macizo. Son tan solo unos minutos, tras los cuales llegamos a una cumbre cubierta de roca y hierba. Frente a nosotros, unos metros por debajo, aparece por fin la Braña de los Tejos, rodeada de un vallado de madera que lo protege del acceso del ganado.



Es el momento de explorar tranquilamente este lugar, en donde además de varias docenas de respetables ejemplares de tejo, se encuentran también abundantes acebos. Tras solazarnos con el lugar, emprenderemos el regreso por el mismo camino.







Comentarios.

El recorrido coincide en buena medida con el sendero de Pequeño recorrido PR-S-4. La dureza de este recorrido viene dado por el desnivel acumulado que ronda los 1000 metros, muchos de ellos concentrados en un duro ascenso. Por lo demás, el hecho de avanzar en todo momento por camino limita la dificultad.

Una alternativa bastante interesante, si se dispone de dos vehículos. Es realizar el descenso por el camino que conduce hasta Lebeña. Track de la ruta.


2 comentarios:

  1. Excelente trabajo. Voy a visitar Cantabria este verano y me estoy dejando guiar por tus opiniones e ideas sobre rutas de senderismo. Muchas gracias

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  2. Gracias por tus comentarios. Probablemente la semana que viene retomaré las entradas, aunque en principio las rutas no serán tan espectaculares. Si quieres pregutnar algo no dudes en hacerlo.

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