lunes, 29 de noviembre de 2010

Tudanca

Aguas arriba de Cosío se levanta la emblemática localidad de Tudanca, a los pies de la ladera herbosa.

Lugar ensalzado en Cantabria, destaca por su arquitectura popular y por ser origen de la raza vacuna homónima.




Sin embargo su fama le viene sobre todo de su simbolismo literario. Aquí se ubica el escenario principal de la novela Peñas Arriba, la obra cumbre de José María de Pereda y un palacio del siglo XVIII, La Casona, propiedad en su momento de José María de Cossío, fue centro de reunión de numerosos literatos del principios del siglo XX y funciona hoy como biblioteca.


Más información aquí.

viernes, 26 de noviembre de 2010

Ruta de senderismo: Por las faldas de Peña Sagra

Hoy describiremos una ruta que discurre por los valles formados por el río Vendul y tributarios, a su vez afluentes del Nansa por su parte occidental. Aunque no presentan unos valores naturales excesivamente resaltables, podemos destacar las amplias perspectivas de la sierra de Peña Sagra por su parte sur, un extenso acebal y las vistas sobre el emblemático pueblo de Tudanca.

Dificultad: Media
Orientación (sin GPS con track o cartografía): fácil
Belleza: Normal
Tiempo: 4horas 45 minutos (19,5 kilómetros)


Situación.

Para acceder a San Sebastián de Garabandal, punto de partida de la ruta, debemos seguir la A-8 en dirección a Oviedo hasta Cabezón de la Sal. Tomaremos la carretera que remonta el valle del Nansa hasta llegar al municipio de Cabuérniga y capital, Valle. Desde aquí seguimos hacia la derecha superando el collado de Carmona hasta llegar a la localidad de Puentenansa.
Una vez allí nos desviamos a la izquierda y ya en Cossio, hacia la derecha; tomando la pista que conduce a San Sebastián en unos 5 kilómetros adicionales de moderado ascenso. Dejaremos el coche a la altura de las primeras casas, en una especie de plaza-ensanchamiento.

Puntos de Interés
Vistas sobre peña Sagra. Acebal de Abellán, cursos de los arroyos, manchas de bosque autóctono, vistas sobre Tudanca.

Descripción de la Ruta
Desde el punto indicado tomaremos la calle de la izquierda y muy pronto la segunda calle a la izquierda. Si no nos hemos equivocado abandonaremos rápidamente el pueblo por una pista cementada entre cercas, a la altura de una señalización del camino a Castilla.




De hecho la primera mitad de la ruta de hoy se corresponde con el antiguo camino que empleaban los pobladores de Rionansa y Lamasón para llegar a Castilla a través de Polaciones, hasta que la tecnología permitió abrir la carretera paralela al Nansa. No obstante no nos fiaremos mucho de las señales de este sendero señalizado por el Ayuntamiento de Rionansa, ya que nos puede llevar a confusión para el trayecto que pretendemos recorrer.

Rápidamente llegamos a una zona más abierta, a unos cientos de metros del fondo del río o Arroyo Vendul, principal corriente de agua de esta zona. A los 500 metros rechazamos un primer camino a la derecha, bajamos un poco y volvemos a rechazar, al cabo de un kilómetro, un nuevo camino a la derecha, de modo que seguiremos sin alejarnos en demasía del cauce del río.





De hecho poco después del último cruce afrontamos un pronunciado descenso alcanzando y cruzando el cauce del arroyo citado a los dos kilómetros de recorrido total. Desde este punto comienza un tramo muy duro de ascensión, ya que en unos tres kilómetros deberemos subir de los quinientos metros de este punto a más de ochocientos.

Las duras rampas se afrontan alternando tramos rectos con varias revueltas, de modo que alternativamente estaremos orientados o bien hacia el pueblo de partida y la sierra del escudo de Cabuérniga, al fondo, o bien hacia el alargado perfil de la sierra de Peña Sagra, con el macizo prisma del Cornón, a mas de 2000 metros de altura, como punto culminante. Al otro lado de la sierra se encuentran los valles de Liébana, contribuyendo con ello al clima tan peculiar de dicha comarca.


La vegetación por su parte, alterna prados con áreas de bosque en proceso de recuperación, con muchos claros ocupados por el estrato arbustivo. De hecho esta será la tónica dominante en la mayor parte de la ruta. El camino es fácil de seguir pues tan sólo tendremos un camino secundario a la izquierda, hacia el kilómetro 3 y a la altura de una de las revueltas.



A medida que ganamos altura los árboles van siendo cada vez más escasos, estando representados fundamentalmente por acebos. Finalmente en el kilómetro 5 termina la parte más dura de la ascensión, coincidiendo un pequeño cambio de vertiente y, al hilo de lo anterior, nos internamos en lo que se puede denominar con propiedad un bosque de acebos, ya que cubren buena parte del área más próxima. Un ecosistema sin duda de gran valor.


Tras ascender un poco más, acabamos llegando a una especie de nave en regular estado de conservación, caracterizado por un tejado de pizarra negra, a la que se encuentra anejo un cercado. Desde aquí volvemos a acceder al valle alto del Vendul observando ya toda la falda de la sierra de Peña Sagra e incluso el camino que bordea la misma y que constituye nuestra ruta de regreso.



Sin mayores novedades seguimos avanzado por el acebal de Abellán. Nos encontramos un par de paneles informativos y, finalmente en el kilómetro nueve de recorrido total llegamos al herboso collado de Abellán, en donde encontraremos varios paneles informativos. Nuestra opción ha de ser el camino que, girando casi 180 grados a la derecha, nos lleva de vuelta a San Sebastián, pero antes merece la pena avanzar unos metros por la pradera, un poco hacia la derecha, para poder ver los pueblos de Tudanca y La Lastra varios centenares de metros por debajo del punto en el que nos encontramos.




Tal y como reza el cartel nos quedan 11 kilómetros hasta San Sebastián, que se harán un tanto monótonos por lo abierto del paisaje. La primera mitad discurre por la faldas de la sierra, sin apenas descender de altitud, y cruzando los pequeños torrentes que bajan desde la parte alta, todos con un cartel informativo de su nombre. Por otro lado, a la altura del único repecho que encontraremos en este tramo, se sugiere una ruta para el ascenso al Cornón.







Faltando unos cinco kilómetros para el punto de llegada el camino empieza a descender más claramente, casi al mismo tiempo que pasa a orientarse en dirección noreste. Nos sirve de guía un pequeño arroyo casi seco en su parte alta al aprovecharse como captación de agua potable.

Cuando llevamos unos 18 kilómetros de recorrido total, algo después de que el camino se haya transformado en pista asfaltada, hemos de obligarnos a tomar el desvío que a mano derecha nos obliga a afrontar una dura rampa. Serán solo unos doscientos metros y nos permitirá reducir el trayecto y evitar un último ascenso final, además de ofrecernos una panorámica sobre el pueblo.


En efecto, al llegar a un depósito de agua se acaba la rampa y observamos a nuestros pies San Sebastián de Garabandal, a donde llegaremos sin mayores contratiempos.


Comentarios
Aunque la ruta es algo larga, se puede afrontar sin mayores problemas sin no tenemos prisa. Poco después del collado de Abellán, nos encontraremos una fuente natural acondicionada para beber y para llenar nuestra cantimplora. La ruta es bastante adecuada para realizarla en bicicleta de montaña, aunque tal vez algo mejor en sentido inverso.

He querido dejar para el final los comentarios referidos a San Sebastián de Garabandal. El día que realicé la ruta me encontré con que buena parte de la gente hablaba en inglés, también sorprende la reconstrucción de edificios y la presencia de un buen número de apartamentos en un pueblo fuera de las principales rutas turísticas. La razón está en unas supuestas apariciones de la Virgen María (no reconocidas por la Iglesia Católica) en el lugar. Existe un vía crucis y una capilla en la ladera que se eleva sobre el pueblo y hay cierto número de creyentes extranjeros que acuden al lugar.

Track de la ruta



miércoles, 24 de noviembre de 2010

Collado de Ozalba y Cosío

Río Nansa arriba entramos en el municipio de Rionansa y su capital Puentenansa. Desde aquí una buena opción es tomar la carretera que hacia la derecha asciende el collado de Ozalba o Jozalba para a los pocos kilómetros llegar a un bonito mirador.

Vistas sobre el pueblo de Obeso, con su torre medieval.

Vistas sobre Puentenansa. Al fondo la Collada de Carmona.

Estos pueblos presentan un patrimonio arquitectónico harto interesante. Aquí unas imágenes de palacios en Cosío.







Desde Cosío parte la carretera de acceso a San Sebastián de Garabandal. A la entrada de este lugar tenemos un merecido monumento dedicado a la Madre del Emigrante.


La cartela incluye una sencilla pero bonita poesía:
"Hijo mío vuelve pronto
y no te olvides de mí
tu sabes lo que quiero
y lo que rezo por tí.
Si un día al regresar
ya no me encuentras aquí
tu sigue volviendo hijo mío
y reza siempre por mí"
Desde San Sebastián parte la ruta de Senderismo que describiremos en el próximo post.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Cuevas de El Soplao

Ya hay mucho hablado y escrito sobre estas cuevas, así que voy voy a dar unas breves pinceladas y mostraros algunas fotos del exterior. Para más información aquí tenéis la página oficial.

La cueva se descubrió como resultado de una actividad minera que se desarrolló durante muchos años en la zona, y destaca sobre todo por la cantidad y calidad de sus formaciones excéntricas de un color blanco inmaculado.
Aquí todo el estaribel montado en torno a las cuevas...y lo que te rondaré morena.

Se ha creado una especie de estación en la que se monta en un tren que nos llevará al interior de la cueva. Ojo, apenas son unos centenares de metros y luego la visita se hace a pié.

Aquí la entrada.
La cafetería y sus vistas.

El entorno.

Más vistas.



En definitiva, se ha creado una infraestructura que no sé muy bien si es para acoger mejor al visitante o para vender mejor la moto y de paso cobrar un poco más. De todas formas, y más allá del abuso de exageraciones y publicidad estas cuevas son uno de esos sitios a los que hay que ir, pues es una auténtica maravilla, al menos una vez (yo la visita la he hecho dos veces y la segunda el recorrido se hace un poco corto).
La entrada general en teoría son 10 euros (año 2009) pero en la realidad son casi 11 porque te cobran la tramitación de compra por cajero automático y es casi imposible evitarlo; a no ser que arriesgues a ir el día en cuestión y comprarlas sobre la marcha, teniendo en este caso muchas papeletas para quedarte sin entrada.
Existe una visita que llaman "de aventura", bastante más larga que sale por unos 30 euros. Yo no la he probado pero cuentan que tampoco es muy compleja, sólo que hay que ir preparado (el material te lo dan con la entrada) porque la infraestructura no es tan buena y hay algunos punto en los que te ensucias de barro.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Ferrería de Cades

Muy cerca de Cabanzón, y enfilando ya el valle del Nansa encontramos la ferrería de Cades, restaurada y visitable.






La visité el año pasado. La entrada cuesta 3 euros con visita libre y 5 para verla en funcionamiento. Si os decidís optad por la segunda opción, aunque deberéis esperar a las pocas sesiones diarias. Aquí un vídeo.
También es recomendable la excursión organizada por Feve de visita combinada con las cuevas de El Soplao, muy cercanas (las veremos en el próximo post).

lunes, 15 de noviembre de 2010

Cabanzón: encina y torre

Nuestra siguiente parada en pueblo de Cabanzón. Veremos su torre declarada BIC. perteneciente al señorío de los Rábago.


Y la llamada "encinona de Cabazón". Un bonito ejemplar sin duda, pero no tan grande como otros ya mostrados en este blog.

viernes, 12 de noviembre de 2010

La Torre de Estrada

En esta última serie de entradas de esta temporada nos vamos a ocupar del Valle del Nansa, remontándolo hacia su cabecera.
El primer punto en el que nos vamos a parar es la Torre de Estrada, a poca distancia de San Vicente de la Barquera, aunque fuera de los recorridos más habituales.
Esta torre es unos de los restos medievales más importantes de la comarca, aunque estéticamente no llame mucho la atención. Aunque la estructura corresponde al siglo XIV, se han encontrado indicios constructivos que se podrían remontar al siglo XII.
La Torre ha pertenecido desde siempre a la familia de los Estrada, prepoderante desde tiempos de la reconquista. Su lema lo dice todo:
"Yo soy la casa de Estrada
fundada en este peñasco
más antiguo que Velasco
y al rey no le debo nada"
Hace unos años sus propietarios la cedieron al Ayuntamiento de Val de San Vicente, comenzando con ello el proceso de reconstrucción. Durante los periodos veraniegos la torre es visitable, si bien como vemos acaba de iniciarse un nuevo periodo de acondicionamiento, al parecer para instalar un museo dedicado a los maquis.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Las secuoyas del Monte Cabezón

Gracias al Tejón, pude saber que se me había quedado en el tintero un lugar de muy fácil acceso y visita. Se trata del Monumento Natural de las Secuoyas del Monte Cabezón, en la carretera que Une cabezón de la Sal Y Comillas.

Como es habitual un aparcamiento bien adecentado, tal vez algo pequeño, aunque no tuve problemas pues no había más visitantes.

Un mirador nos permite tener una impresión de este pequeño paraje, son sólo 2,5 hectáreas, que constituye uno de los escasísimos ejemplos de bosques seminaturales de este tipo de árbol en la península.
Tiene su origen en un programa de repoblación forestal llevado a cabo durante los años 40 en todo el entorno del Monte Corona, en el que junto con especies autóctonas se plantaron numerosas árboles alóctonos, como abetos, robles americanos...y secuoyas.

Un sendero que lo recorre longitudinalmente nos permite adentrarnos en el lugar.


Las secuoyas se han adaptado muy bien al lugar, alcanzando una altura media de 36 metros.

La distribución de sus ramas recuerda de alguna manera a ciertas obras de arte vanguardista.

Un lugar para el reposo y la contemplación.


Creo que tuve suerte al llegar al lugar con la caída de la tarde, que produce ese original efecto en el bosque.



lunes, 8 de noviembre de 2010

Castro Urdiales

Hace bastante tiempo os puse unas fotos un tanto aceleradas de Castro Urdiales. Hoy os traigo unas imágenes con algo más de calma. El desconocedor del lugar se puede llevar una impresión algo equivocada, pues este núcleo, salvo en la franja costera tiene un perfil urbano de lo más común.

Puerto deportivo y al fondo la iglesia y el castillo-faro.

Castillo de Ocharán, de época modernista, que al parecer está rodeado de un interesante jardín vetado a los mortales (en algún sitio leí que se podiá visitar, pero no descubrí nada al respecto).
Palacio de Ocharán o de Toki-Eder, relacionado con el anterior.


Playa de Ostende, creada artificialmente.

Ayuntamiento.


Puente Medieval e Iglesia de la Asunción; probablemente el mejor ejemplo del gótico en Cantabria.


La Casa de los Chelines.


Otra perspectiva del Puerto Deportivo, desde el final del rompeolas. Al fondo vemos el perfil semiesférico de la cima del Cerredo (aquí la ruta de ascenso al mismo)