Ruente

De regreso al valle del Saja abandonamos el municipio de Cabuérniga para entrar en Ruente. En esta localidad podemos ver también algunos buenos ejemplos de arquitectura civil, como el Palacio de Mier.

Pero lo que realmente merece la pena visitar en Ruente es su espectacular Fuentona, un verdadero río subterráneo que sale a la luz junto al mismo casco urbano.

Miles de litros por segundo se crean de manera absolutamente repentina. Se ha acondicionado un pequeño parque-paseo para disfrutarlo.

Muy pronto el río llega a un curioso puente peatonal de nueve ojos.

Lo mas curioso del lugar es que, de pascuas a ramos, y aparentemente sin nigún patrón en cuanto a periodicidad, época del año, duración...la Fuentona se seca de manera repentina (ver noticia) y de manera igualmente repentina vuelve a manar con la misma fuerza que antes.

Aunque los expertos atribuyen el fenómeno a algún tipo de sistema sifónico que acumule bolsas de aire que interrumpen temporalmente el flujo, la cultura tradicional ha desarrollado su propia explicación legendaria del fenómeno, según la cual en el interior de la cueva habitaría una caprichosa anjana (personaje de la mitología cántabra) que interrumpiría el flujo a su antojo.