La Cavada es un lugar relativamente famoso en Cantabria por haber albergado una fábrica de cañones fundada en el siglo XVIII. Esta fábrica, junto con la de su vecino Liérganes, son las causantes de que la configuración de los valles pasiegos sea la que contemplamos hoy, al haber despoblado la mayor parte de las masas boscosas para la fabricación de cañones. Un dato de oídas: se necesitaban 1500 hayas para fabricar un sólo cañón.
Sin duda el resto más representativo de aquella ápoca es el arco de entrada a la fábrica, en la que figura el nombre de Carlos III, y hoy paso para la carretera.
Por la localidad aparecen dispersos, a modo de museo al aire libre, algunos restos de la instalación militar
También se ven algunas casas de indianos, con interesantes jardines:
Muy cerca se encuentra la localidad de Rucandio, perteneciente, al igual que La Cavada, al municipio de Riotuerto. Lo más destacable sin duda es su momunental iglesia caracterizada por su torre de planta octogonal.
Según la Encyclopaedia Britanica de hace ya tiempo. Casi de la época de Carlos III y la Ilustración, nos dice que Santander y otra ciudad importante ahora y ambas capitales de Comunidades Autónomas, formaban parte de la provincia de BURGOS. Que dicen los Cántabros cuando les preguntas al respecto?
ResponderEliminarPues yo leí en una posada de Asturias que, antiguamente, una parte de Cantabria era asturiana. Es decir que existía Asturias, pero la zona de Cantabria no estaba muy delimitada...¿Eso es cierto?
ResponderEliminarA mí las casonas cantabras que pude ver, en las navidades pasadas, no me recordaron para nada a las asturianas y en cambio algunas construcciones me remitían a Galicia. La piedra, la forma de tallarla... algunos pazos están construídos con grandes bloques de piedra cortada con forma rectangular.
Un saludo
Carmen
Tuve la oportunidad de conocer en la Ruta Quetzal 2009 Chile-España a uno de los descendientes de los fundidores flamencos que trabajaron en esta fábrica de cañones.
ResponderEliminarUn saludo desde Burgos
Este Cañon que está en Edimburgo lleva el escudo imperial de nuestro Felipe II.
ResponderEliminarY a Alberto Gamarra le pediria que se extendiera un poco más de como ese descendiente sabia que sus orígenes son flamencos.
Caramba!! Que animación ha cogido esto. Lo primero gracias a todos por la información y comentarios. Bueno, cuento lo que creo no tanto lo que sé. Intentaré que no sea muy extenso. Efectivamente durante bastantes años la provincia de Burgos, comprendió la casi totalidad de la actual Cantabria y aproximadamente la mitad de La actual La Rioja. No obstante, en estos temas hay dos factores: la historia y la lógica. La Historia, en estos casos, depende de hasta donde nos retrotraigamos. Los historiadores de la época de la edad media hablan de una organización en alfoces y luego en merindades, cuya configuración guardaba relación con antiguos dominios señoriales. Estas comarcas, se extendieron de norte a sur, comprendiendo en muchos una misma merindad territorios a ambos lados de la cordillera, como la Merindad de Laredo y la de las Asturias de Santillana (nombre por cierto que puede que sea el que ha llevado a confusión a los interlocutores de Carmen, de hecho más bien una parte de Asturias pertenecía a esta Macro-merindad, con capital en Santillana del Mar). A partir del siglo XVI se agrupan merindades en Provincias, pero sin criterios muy lógicos. Existen mini-provincias y provincias enormes como la de Burgos que citamos (otro ejemplo, el actual Valderedible, e incluso algo de Burgos, pertenecía a la provincia de Toro). A principios del siglo XVIII se hace una reoganización de las privincias que da lugar a la situación actual. Por otro lado, los argumentos históricos son siempre subjetivos, ya que cada uno se remonta hasta donde le interesa. Por ejemplo, los cántabros pueden decir, no sin cierta razón, que su pueblo tiene un origen histórico claro y que fue desde ahí desde se repoblaron la mayor parte de las zonas de lo que ahora es Burgos. sigo en otro comentario...
ResponderEliminarPerdon por la chapa. Luego los criterios lógicos, pensando en eficiencia y servicio a los ciudadanos, indican que tiene mucho más sentido separar en dos provincias geográficamente bien delimitadas, que es lo que hicieron los estadistas del XIX. Otra cosa es que haya algunas áreas que no estén todo lo bien que deberían, como parte de los límites en el área de Bricia, Santa Gadea y Los Valles.
ResponderEliminarEn definitiva, no les pico demasiado con algo en lo que yo no acabo de creer mucho. No obstante ya comenté anteriormente que la mayor parte de la gente "aún" no tiene muy desarrollada la identidad regional. Creo que la actitud más extendida es simplemente ignorarnos (como nosotros a Portugal, más o menos). Otra cosa es, como ya comenté anteriormente, que yo no crea en el estado de la Autonomías. Una cosa es dividir la geografía para ofrecer un servicio más cercano y eficiente y otra cosa es crear entes para consolidar diferencias entre unas zonas y otras y a grupillos de poder locales.
Un saludo
Joder, pues yo he pasado en el albergue juvenil de Rucandio alguno de los mejores momentos de mi vida con mi bro. Jules incontable el paseo de Rucandio a la Cavada, la parada en el Bar de Manolo, el andaluz más conocido internacionalmente y después la vuelta por esa inacanable subida cuando llevas unas cañas de más, por cierto, la iglesia de Rucandio preciosa, pero de noche acojona que da gusto. Eso sí, para algunos siempre será Rockandio.Jules nos queda pendiente dar allí nuestro concierto multitudinario!!! ;)
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La descendencia de estos técnicos de Flandes, orgullosos de su trabajo, ha llegado hasta nuestros días. Sus apellidos, en su mayoría flamencos, pasaron a castellanizarse en el siglo XVIII. En Riotuerto, Liérganes o municipios limítrofes, es fácil encontrar hoy vecinos con algún apellido Arche, Baldor o Valdor, Del Val, Bernó, Cubría, Guate, Lombó, Marqué, Oslé o Uslé, Otí, Rojí, Roqueñí, Sart, etc.
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